Esta semana hemos dicho adiós a una de las grandes del cine y a uno de los rostros más bellos que han habitado la meca del cine: Elizabeth Taylor.
Con una belleza exótica en la que todo parecía encajar a la prefección para resaltar sus ojos de color violeta, Liz Taylor ha sabido envejecer conservando su belleza hasta sus últimos días.
Es tanto lo que hemos leído y escuchado sobre ella estos días, que no consigo evitar pensar en Cleopatra con otro rostro que no sea el suyo.
Y pensar en Cleopatra en pensar también en un tratamiento que tuve la suerte de probar y que también llevaba su nombre.
El lugar, un lujoso centro de wellness ubicado en el Hotel Palm Beach en la maravillosa isla de Gran Canaria.
Un hotel famoso por ofrecer uno de los mejores desayunos de la isla, y una estado de relax y bienestar absoluto.
Las hamacas de madera perdidas entre una preciosa vegetación pueden abandonarse un ratito para probar el que para mi, es uno de los mejores tratamientos de hidratación y relax que he probado: la envoltura con crema Cleopatra.
Al principio parece un tratamiento más, aunque la simpatía del personal y la paz que inspira al llegar debieron hacerme suponer que iba a ser algo especial.
Me tumbaron sobre lo que aparentemente es una camilla de masaje y te van aplicando una crema de leche de cabra y vainilla con un olor absolutamente delicioso. Me aplicaron esta crema tan deliciosa por todo el cuerpo. Os puedo asegurar que fue un verdadero lujo para mi piel.
Cuando tienes todo el cuerpo impregnado de la crema te envuelven con un papel (como si fuera una servilleta de papel gigante) y después con una lona algo más pesada desde los pies hasta los hombros.
Y aquí es cuando llega la sorpresa y lo mejor del tratamiento: como por arte de magia, la camilla se va abriendo mientras desciendes muy despacito y quedas dentro de una bañera a 36,8 grados.
Esto hace que la hidratación sea perfecta pero el estar 25 minutos envuelta con la lona y notando la suave presión del agua en todos los músculos del cuerpo ha sido la experiencia mas relajante que he probado.
No me quede dormida de puro milagro… o de puro relax.
De verdad, si tenéis ocasión de probarlo, es un verdadero regalo para los sentidos.
La piel se hidrata de una forma espectacular y los músculos se relajan por completo con la presión del agua… y tú sales de allí creyéndote la mismísima reina del Nilo.
Podéis ver más datos del hotel y el wellness Center aquí.
¿Qué opináis? ¿Habéis probado algo parecido?