Aún recuerdo aquella llamada de teléfono.
La revista ELLE se ponía en contacto conmigo para interesarse por el blog que escribía en mis ratos libres. Parecía un sueño…
Desde aquel día ha sido un verdadero orgullo estar vinculada a una revista maravillosa y haber formado parte del equipo de bloggers de ELLE.es.
Muchos pensarán que estoy loca, otros no lo entenderán, pero si algo he aprendido durante los diez años que llevo trabajando en internet es que este mundo se mueve muy deprisa, y quedarse quieto nunca es bueno.
Es por ello, y porque el cuerpo me pide cambio, que hoy digo adiós a este blog, y lo hago dando las gracias al equipo de ELLE.es, y en especial a Sibila, una gran persona, una gran profesional y el verdadero alma de todo el portal.
Gracias a todas las que habéis acudido diaria y puntualmente a la cita, y habéis hecho que este blog fuera realmente importante.
No me parece elegante ni correcto daros más datos sobre mi futuro inmediato, además, la blogosfera es muy pequeña, y vosotras muy listas.
Los que me conocéis personalmente, sabéis que no me gustan las despedidas, y que me emociono con facilidad, así que «Hasta dentro de un ratito!»