Ya sabíamos que Emma Watson se había convertido en la nueva embajadora de Lancôme.
La noticia me sorprendía en un principio pero tengo que reconocer que me parece todo un acierto.
Una chica joven, monísima y una gran profesional… las mismas cualidades que me hicieron enamorarme de Lancôme cuando Isabella Rosellini era su imagen.
El lunes Lancôme presentaba su nuevo perfume Trésor Midnight Rose y para ello preparó una maravillosa y sorprendente fiesta en honor a Emma Watson, su embajadora.
La aparición de la actriz estuvo llena de magia, suspense y glamour.
Pasadas las nueve de la noche la magia de Trésor Midnight Rose inunda la sala y la expectación es máxima en la sala, repleta por cierto de personalidades internacionales (el diseñador Alber Elbaz, fotógrafos como Mario Testino y Dominique Issermann, actores como Cyril Descours y Julien Boisselier, las periodistas Ana Sophie Lapix y Daphné Burki, la modelo Marie Ange Casta…).
De repente,silencio.
La sala se oscurece y un juego de luces púrpura precioso y unas rosas en «light painting» dan paso a una docena de jóvenes en traje negro con sombrero van apareciendo y separándose. Finalmente aparece Emma Watson.
Absolutamente genial ¿verdad?