¿Pero en qué momento de enajenación mental decidí yo subirme a unos tacones tan altos?
Eran comodísimos en la tienda donde me los probé, y mira que desconfío de cualquier tacón alto…
Eran comodísimos cuando salí de casa, y mira que caminé por la cocina para asegurarme…
Y eran comodísimos cuando llegué, pero ahora, después de caminar tres calles y estar de pie un buen rato, no los puedo soportar… ¡qué dolor!
Y mientras prometo, y vuelvo a prometer, que no me pondré jamás tacones tan altísimos y mientras rezo y vuelvo a rezar para llegar al coche donde guardo unas bailarinas para casos de emergencia (y podéis creerme, esto lo es), intento que el resto de viandantes no noten el sufrimiento que llevo encima y que acaba con los últimos resquicios de elegancia que me quedaban hoy…
Y me temo que no soy la única.
Se acaba el calor y con él, decimos adiós a las sandalias, a las alpargatas y empezamos a utilizar calzado más cerrado y, a veces, más incómodos.
Las tendencias de la pasarela invitan un año más a abusar de los tacones, y el fín de la jornada intensiva, exponen a nuestros pies a muchas horas de sufrimiento subidos a unos tacones a los que muchas veces, no estamos acostumbradas.
Aunque en invierno, no necesitamos tantos cuidados en nuestros pies como en verano donde los pies están expuestos a la mirada de todos, sí que es cierto que debemos mantenerlos en buen estado para evitar que sufran más de lo necesario.
Las marcas lo saben y cada vez nos ofrecen más productos que intenta aliviar el maltrato al que nuestros pies se ven sometidos.
En Foot Petals están acostumbrados a ayudarnos con los problemas que ocasiona el calzado: plantillas, almohadillas, … y todo tipo de accesorios que hacen que la vida parezca más fácil subida a unos tacones.
El Survival Kit es una idea estupenda para protegernos de los tacones asesinos y creedme, funcionan.
Otra de las ideas que me encanta es el kit para sobrevivir en las fiestas de Pretty Ballerinas.
Además de ofrecernos las bailarinas más bonitas del mercado, nos ayuda también a vencer al enemigo, a los tacones de vértigo.
Mete en el coche o en el bolso este kit de emergencia y cuando no puedas más, presume de zapatos cómodos. Serás la envidia de más de una, te lo aseguro.
Mi última adquisición para mimar un poco los pies y que sean capaces de resistir más y mejor a los tacones, son los calcetines hidratantes de Sephora.
La verdad es que llevaba tiempo pensando en probarlos y me parecía un producto más propio del verano, pero aprovechando la oferta del 20% que Sephora hace estos días a las socias, y dado que el precio es bastante elevado, ha sido ahora cuando me he lanzado.
Valen para 50 usos, se pueden lavar en la lavadora y son muy cómodos.
Van impregnados por dentro de una solución hidratante que cuida tus pies durante 20 minutos y les proporciona fuerza o alivio, según lo que necesites.
Además son monísimos.
Y por último, al llegar a casa, después de una jornada en las alturas, siéntate y date un masaje sin prisa para descontracturar las plantas de los pies.
Utiliza cremas como la exfoliante de pippermint de The Body Shop o simplemente una crema hidratante que tengas en casa.
Sephora lanza en los próximos meses una crema exfoliante de pies que ya existe pero ahora lleva incorporado una especie de cepillo aplicador que dará un masaje mientras exfolia la planta de los pies.
Sea lo que sea, mima un poco los pies, evita los tacones siempre que puedas e hidrátalos con cualquier crema. Tus pies te lo agradecerán.
Me encantan los recursos que has presentado hoy Susana, en especial el kit de Pretty Ballerinas!! Que monada! Me encantan! Yo tamién soy usuaria de tacones porque claro con mi 1,55m de estatura tendré que recurrir a ellos… ! jajajaja
Un beso enorme!
Laura
Me encanta todo lo del cuidado de los pies, aunque a veces da un poco de pereza, sobre todo en invierno. Ya he entrado en la web española de Kiehls pero me dan todos los productos agotados, así que a seguir esperando! Besos.
¡Dios mío, qué identificada me he sentido contigo!
Anteayer me puse por primera vez en la temporada los altos salones negros que me compré hace unos meses. Y no sé si me han encogido los pies, las medias que llevaba eran demasiado suaves, o ambos, pero el caso es que tenía que luchar porque no se me escaparan los zapatos a cada paso. Y eso, unido a lo altos que eran y que hacían que me dolieran los pies (porque, además, los dedos se me encogían al resbalarse los pies dentro del zapato hacia adelante…), hacía que mis andares fueran…cómo explicarlo…¿poco femeninos? Más bien eran poco humanos, porque parecía un pato.
Gracias por las recomendaciones de productos para los pies, tengo que probarlas. Aunque tengo un problema: cada vez que me pongo crema en los pies no duermo. Sí, has leído bien, no duermo. No sé por qué, pero es que no pego ojo. Así que, entre las ojeras y los talones resecos, me quedo con lo segundo, que se ve menos, jeje.
¡Besos!
Rosa
http://affairsbeauty.blogspot.com
madre mia cuanta razón tienes!
yo voy casi siempre en zapato plano pero claro cuando una se quiere lucir….es necesario un poquito de tacón lo que pasa es que luego….luego no se puede dar un paso!
creo que voy a hacerme con todos los trucos para mi precioso maletero.
muchisimas gracias por compartir esto aisss soy tan fan de este blog!!!!
muaaaaaak
Llevas toda la razón, pero yo lo hago al contrario, cuando veo unos zapatos de tacón que me gustan los pruebo y me los compro y luego no los puedo llevar y me decepciono.
Que pasada el Kit de Pretty Ballerinas. Yo también lo tengo uno pero en plan casero. Me parece ideal este, ¿dónde puedo encontrarlo?. Yo también soy de las que dejan los tacones para ocasiones muuuuuy especiales, pero esos días me veo tan favorecida…Está claro: Para presumir hay que sufrir.
Soy Podóloga y siempre les digo a mi pacientes que se salgan de la alfombra al probarse los zapatos o de la moqueta (si es que la tienda la tiene) porque da la sensación de más blando de lo que en sí es. Estoy de acuerdo, los productos de Foot Petals son una maravilla para poder presumir un poco 🙂
Me uno a vuestro club de «la muerte en los talones», soy la que más sufre en las bodas. Me encantan esas bailarinas! ¿sabeís cuánto cuestan?
Hace años, después de una tarde larga de caminata y compras con mi madre y mi hermana, mi madre solía ponernos al llegar a casa un barreño de agua templada con sal para descansar los pies y nos dejaba como nuevas, ¿sabeís algo sobre esto? ¿tiene algo que ver la sal en el agua?
Susana, felicidades por tu blog, me levanta el ánimo cada día y desde que te leo tengo más ganas de cuidarme. Gracias!
Hannah,
La verdad es que esas valen bastante, lo voy a mirar, pero valen cualquiera.
Estas son una idea monísima para regalar por ejemplo.
Yo también hacía lo del barreño con agua caliente y sal y alivia muchísimo…. aunque no sé muy bien el motivo «científico»… pero relaja tanto…
un abrazo y gracias por leerme!!!!