Sólo le faltaba el Oscar, y ahora con la increíble actuación del Cisne Negro, no podía haber otra candidata como ella en el firmamento hollywoodiense. Tenía que ser Natalie. ¡Enhorabuena Nat!
«Es una locura», afirmaba entre lágrimas y mostrándo al mundo lo guapísima que está con su vestido pre-mamá, «he tenido una suerte de poder trabajar en esto…».
Ayer, esta niña dulce y tierna, lució guapísima con un maquillaje sobrio y elegante.
Una melena a un lado con ligeras ondas y un maquillaje muy natural, con labios discretos en coral y ojos con un ahumado en colores naturales.
El vestido premamá era de Rodarte y los pendientes en cascada a juego eran de Tiffany & Co., al igual que los anillos.
Siempre me ha encantado Natalie Portman.
Me parece que tiene una belleza insuperable, pero lo que más me gusta de ella es que no se conforme con ello y decida superarse a sí misma cada día, física e intelectualmente.
Natalie Herslagh nació en Jerusalén hace 30 años.
Hija de un médico israelita y una norteamericana, se mudó a EEUU muy pronto donde obtuvo la doble nacionalidad.
Desde muy pequeñita destacó por su belleza. Cuando era una niña de cuatro años, un agente visitó la escuela de danza donde ella daba clase y le ofreció posar como modelo en un catálogo.
Suele decir que era una niña muy seria y responsable y que tenía las cosas más claras que otras niñas de su edad.
Prueba de ello es que cuando un día alguien la vió en una pizzería y le ofreció ser modelo de Revlon, ella lo rechazó de inmediato, para no despistarse de sus estudios y de la interpretación.
En sus primeras películas sus padres obligaron a suprimir escenas que no consideraban apropiadas para su edad y a rodar durante las vacaciones. Esta exigencia se mantuvo durante muchos años. Gracias a gestos como este, ha podido compatibilizar los estudios y es Licenciada en Psicología por la Universidad de Harvard.
Ni siquiera pudo ir al estreno de Star Wars por coincidir la época de exámenes.
Natalie Portman (apellido de su abuela materna que adoptó para que fuera más comercial) habla seis idiomas: hebreo, inglés, español, francés, japonés y alemán.
Existe un brillo de labios de la marca Stilla que lleva su nombre, e incluso una banda de rock llamada Natalie Portman Shaved Head.
Le apasiona el buceo, la danza, cuida de sus dos perros, Noddle y Charlie, y es capaz de adaptar su cuerpo a cualquier papel.
Se rapó la cabeza por exigencias del guión en V de Vendetta y para Cisne Negro preparó su cuerpo durante 9 meses y se sometió a durísimas sesiones de danza para poder hacerlo como una bailarina profesional.
Para encarnar el papel de Nina en El Cisne Negro se ha sometido a una estricta dieta y ha sido capaz de tener una espectacular disciplina con el ballet.
Comenzó un año antes y tomó 2 horas de clase diarias durante 6 meses.
Después pasó a recibir 5 horas de clase diarias durante los siguientes 6 meses.
Añadió un poco de natación y, 2 meses antes del rodaje, tuvo que añadir clases de coreografía, lo que le supuso estar trabajando 8 horas diarias.
Afirma no tener secretos de belleza porque dice que si juntaramos todos los minutos que una mujer dedica a estar guapa, tendríamos un plus de 10 años de vida para ocuparnos de otras cosas.
Claro que esto suena muy bien siendo Natalie Portman, porque el resto de las mortales o le ponemos remedio o las arrugas y la cara de sueño nos delatarán.
El maquillaje que más favorece a Natalie es sin duda muy natural.
Todo el protagonismo se lo llevan sus ojos que remarca con máscara de pestañas para curvarlas y alargarlas hacia fuera.
Los labios suelen ir muy naturales y en muy pocas ocasiones se marcan en tono más fuerte.
Generalmente para darle dramatismo a algún personaje.
Sólo me queda dar la enhorabuena a Natalie Portman y recomendaros la película de Cisne Negro.
¿Vistéis la gala de los Oscars?
¿Qué es lo que más os gustó?