Lo digo cada vez que me subo a unos y lo volveré a repetir: ¿cómo es posible que el hombre llegue a la luna y no se hayan inventado unos tacones cómodos?
El caso es que ser bajita en este mundo obliga a subirte a unos tacones más veces de las deseadas, y los pies sufren una barbaridad.
Hace unos meses me compré en H&M unas bailarinas monísimas plegables que me llevo a todas partes y que me permiten aliviarme cuando el sufrimiento provocado por los taconazos.
Ayer, descubrí una nueva marca que comercializa unas bailarinas parecidas pero creo que mucho más bonitas.
La idea es la misma: son plegables para llevar siempre contigo y cómodas para alivar tus pobres piecitos.
Cuestan 19,95 euros y se venden en la web: post-party.com