El mes pasado tuve el placer de asistir a la convocatoria de Germinal para visitar sus instalaciones y conocer de primera mano esta maravillosa marca.
¿Quién no ha recurrido alguna vez a las ampollas de belleza instantánea alguna vez? En mi casa son un must en cualquier gran acontecimiento.
Creo que ya las utilizamos por tradición. ¿Qué tenemos una boda o una fiesta importante? Pues es un clásico recurrir a ellas, no sólo para eliminar cualquier huella de cansancio, si no para hacer que el maquillaje dure más tiempo, por ejemplo.
Germinal es que es la primera marca española de alta cosmética. Desde hace más de 30 años se ha propuesto dar soluciones a mujeres reales con problemas reales.
La visita a la fábrica de Germinal, como os decía, fue un verdadero placer, porque además de poner cara a muchas bloggers y de conocer a otras, aprendimos muchísimo.
Y cuando tu día a día está lleno de presentaciones de todo tipo, se agradece mucho un evento tan cuidado y que te aporta tantas cosas.
Si hay algo que me ha impresionado desde que soy blogger de belleza, es la cantidad de productos nuevos que salen al mercado.
Son tantos, y a tal velocidad, que a veces nos da la sensación de que las firmas deciden sacar un producto y lo lanzan en pocos días sin apenas esfuerzo.
Pero no podemos estar más equivocadas.
Los procesos de elaboración de un cosmético tienen un gran número de fases (de investigación, técnicas, sanitarias, etc…) y que lo que debería sorprendernos, es que logren salir al mercado tantos productos.
Nuestra anfitriona en un día tan apasionante fue Marisa Crespo, Responsable de I+D y cosmetóloga de Germinal.
Marisa es una mujer encantadora, que tuvo la habilidad de contar los complejos procesos de elaboración, de forma amena y comprensible para todas las allí presentes.
Nos explicó cuales son las fases de elaboración de un producto cosmético y, aunque es fácil que me olvide de muchas cosas, me encantaría resumíroslo:
La Investigación y el desarrollo de un cosmético pasa por muchas fases:
* Lo primero es la idea del producto en los departamentos de Marketing y de dirección.
Se detecta una necesidad y se trata de dar una solución eficaz.
* A continuación, se eligen los principios activos que sean más apropiados para ese producto.
Por ejemplo, para crear una crema limpiadora interesan principios activos que no penetren en la piel, sino que se mantengan en el exterior y ayuden a expulsar la suciedad. Para crear una crema de protección solar, interesan principios activos que hagan de barrera y no penetren en la piel.
* Se elige el excipiente que contendrá los principios activos.
* Se selecciona la fórmula más adecuada con todo lo anterior.
* Se selecciona el perfume. Normalmente se seleccionan tres y se da a una empresa externa para que haga un test ciego y tome la decisión.
* Se estudia la compatibilidad con el envase.
Dicho así parece una tontería pero imaginaros que una crema corporal viniera en un envase con un aplicador en el que saliera poquísimo producto… nos eternizaríamos ¿verdad?
* Una vez elegidos los componentes de todo tipo, pasan a la fabricación piloto.
* Entre las muchas pruebas que se hacen, la más llamativa (y a la vez la más lógica) es un envejecimiento acelerado durante 12-16 semanas.
Se prueba a diferentes temperaturas, a más de 40º, a 5º, con sol, e incluso se mide la resistencia con cambios bruscos de temperatura.
Se valoran de 8 a 10 parámetros en todas estas situaciones.
* Se realizan test bacteriológicos, es decir, se estudia el comportamiento del producto en caso de contaminación por parte del usuario.
* Se realizan más test para ver si el producto es tóxico en condiciones razonables («condiciones razonables» quiere decir que comprueban si por ejemplo una laca de uñas es inocua en las uñas (no si un niño se la bebe, lógicamete).
* Después vienen los test de eficacia que consisten en que los usuarios lo prueban y se ven los resultados.
Las arrugas, por ejemplo, se comparan poniendo una máscara de silicona en la que quedan marcadas las arrugas y se puede comprar el antes y el después. No se trata de que las usuarias den una opinión subjetiva sino que se basa en datos medibles y cuantificables.
* Los test de uso tratan de medir la idoneidad de la textura (si se absorbe bien, si es muy pringoso…) que, aunque parezca mentira, puede condicionar el éxito del producto en el mercado.
* Se selecciona el perfume.
* Y a continuación comienza un largo registro sanitario y se obtiene el Código Nacional que, como sabéis, es necesario para cualquier producto que se venda en farmacias.
* Y de ahí, dan paso a la fabricación industrial.
Así que como veis, (y teniendo en cuenta, que me habré dejado mucha información por el camino…), el proceso de eleaboración de un cosmético es complicado y está sometido a muchos test de todo tipo.
Así que ya tengo un motivo más para confiar en Germinal, que además de tener productos maravillosos, que podéis ver en este artículo sobre productos Germinal, me inspira mucha más confianza desde que hemos conocido su fábrica y exhaustiva metodología.
¿Qué os parece? ¿Utilizáis productos Germinal?